Practicar yoga es una forma divertida de desarrollar importantes habilidades en un entorno lúdico, positivo y de calma.

Sus beneficios van mucho más allá de lo físico, ya que, además de mejorar la fuerza y la resistencia, o aumentar la flexibilidad y la coordinación, nos aporta múltiples beneficios emocionales: mejora la concentración, la autoconfianza y el conocimiento de uno mismo, ayuda en la gestión del estrés, y promueve el respeto hacia la naturaleza la paz y el amor . Nuestros pequeños de 4 años son ya expertos en esta ancestral disciplina. Y vosotros, ¿practicáis yoga?NAMASTE